Con frecuencia los medios de comunicación de alcance nacional reflejan que la inseguridad en Buenos Aires se cobra vida de inocentes. Lamentablemente, se ha vuelto casi moneda corriente que a diario, al menos, una persona muere a manos de la delincuencia. Indudablemente hay cuestiones en la materia que deben revisarse.
El tema es gravísimo. Tan grave que ha atravesado las fronteras de la capital federal para arraigarse prácticamente en todo el territorio argentino.
En Tres Arroyos pareciera que la inseguridad se encuentra instalada desde hace tiempo. De hecho lo está. En los últimos días, la problemática ha recrudecido en forma notable.
Vale decir que numerosos actos delictivos se cometieron, ya sea a comercios como a familias y que nuevamente pone en duda la capacidad de los funcionarios con respecto al asunto.
Sumado a esto, cabe señalar lo sucedido el sábado 9 de agosto en un negocio ubicado en Azcuénaga 934. Alrededor de las 20.30 horas dos delincuentes ingresaron al comercio con fines delictivos. En ese momento se encontraba Rodolfo Medivid, de 64 años y repartidor de bolsas de nylon, quien recibió un balazo por parte de uno de los vándalos. A causa de la herida la víctima falleció al día siguiente en el Hospital Pirovano.
La muerte de este vecino provocó una profunda consternación en la comunidad tresarroyense, al igual que bronca e indignación.
La pregunta sería: ¿y ahora cómo continúa todo?
Este interrogante se formula a partir de las actitudes que han tomado determinados funcionarios. O mejor dicho como consecuencia de las actitudes que todavía estos no tomaron.
Tal como se dieron los acontecimientos, pareciera que estuvieron esperando que muera un inocente a manos de la delincuencia para empezar a actuar. Al menos deja esa sensación, dado que los robos y asaltos vienen sucediéndose con frecuencia y nadie trató de aportar una solución al tema. Cuando se habla de “nadie” se hace referencia a aquellos encargados de efectuar políticas de seguridad eficientes, tales como el intendente Carlos Sánchez y el secretario de Seguridad Juan Apolonio.
Las últimas informaciones dan cuenta que las investigaciones en torno al asesinato de Medivid están muy avanzadas. Tal es así que ya hay dos menores de edad que se encuentran apresados. De acuerdo a las pruebas recogidas serían los autores del crimen del comerciante.
Si esto realmente se confirma, no cabe ninguna duda que la Justicia debe actuar con total dureza sobre estos individuos. Aplicar penas ejemplares para quienes se “cargaron” la vida de un inocente y provocaron un irreparable daño a la familia de este trabajador es la forma de comenzar a trabajar en contra de la delincuencia.
Sin embargo, esta no es la única solución a la problemática. No alcanza sólo con castigar con duras sanciones a aquellos que delinquen. Se debería comenzar con políticas de prevención que desde hace un considerable tiempo tendrían que estar en funcionamiento y que por ahora nadie parece estar diseñando. Ante lo mencionado, la realidad como principal evidencia.
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Policiales
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1 comentarios:
necesitamos dirijentes y representantes del pueblo como estos periodistas!!!!!!... ESTUDIANTES AL PODER!!!
NO CUALQUIERA!!!!!
P.D: guardenme un puesto.
TELETUBY ESPACIAL
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